Febrero 10,2022
Entregas directas de recursos son parte de los interminables actos de corrupción que caracterizan a esta administración
La senadora Gina Cruz Blackledge criticó severamente que, sin elementos jurídicos, ni consideraciones o análisis económicos, Morena en el Senado haya negado la posibilidad de solicitar al gobierno la reactivación del Programa de Estancias Infantiles, reconocido por la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
La negativa se dio durante la discusión de un dictamen de la pasada LXIV Legislatura que desechó propuestas para reactivar dicho programa.
“Las entregas directas de recursos son parte de los interminables actos de corrupción que caracterizan a esta administración, ya que los programas gubernamentales deben estar sujetos a reglas claras y transparentes y no a la voluntad de quien, mediante dádivas permanentes busca comprar voluntades y votos”, acusó la legisladora panista.
Cruz Blackledge, a nombre de millones de padres y madres de familia, criticó que el gobierno actual entregue de forma directa dinero, sin reglas de operación, sin padrones confiables de beneficiarios, sin trasparencia ni rendición de cuentas.
Abundó que el modelo de transferencias directas gubernamentales es una práctica generalizada cuyas consecuencias han sido profundamente negativas, lo que se refleja en 4 millones de personas en situación de pobreza, con un gobierno que en el discurso se dice humanista, pero en los hechos viola derechos de forma sistemática.
“Es precisamente a través de las estancias infantiles que se puede garantizar el derecho de las niñas y niños a formarse física, mental y socialmente”, dijo.
La senadora por Baja California también lamentó que no se atiendan las preocupaciones de las y los senadores ante un entorno de pandemia que ha convertido al país en un camposanto, por culpa y negligencia gubernamental.
“A pesar de que se han cancelado programas con el argumento de que había corrupción, no vemos todavía las demandas administrativas o penales contra los supuestos responsables”, reiteró.
Para concluir señaló que la muerte de cerca de mil niños en esta pandemia nos pone frente a la triste realidad de un Estado inepto, faccioso, parcial y profundamente corrompido, que es incapaz de dar prioridad a los derechos fundamentales y que, en aras de los delirios presidenciales, está causando cada día muerte, dolor y desesperación.