Julio 06, 2024
La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, a través del Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP), promueve la producción y la industrialización del garambullo para aprovechar sus propiedades nutracéuticas e impulsar la generación de ingresos extras a las comunidades rurales del país.
La dependencia federal señaló que los investigadores del Campo Experimental Bajío, adscrito a este bien público, mantienen su apuesta por la transformación de la cactácea para alargar su vida de anaquel y darle valor agregado mediante la preparación de mermeladas, ates, pasas y otros productos.
La propuesta es porque su vida postcosecha es corta, puesto que a temperatura ambiente comienza a fermentar a los dos días y en refrigeración ocurre en cinco, detalló la Secretaría.
Actualmente, indicó, la producción es de gran rusticidad y aún se mantiene bajo condiciones silvestres, crece en terrenos de baja fertilidad, demanda poca agua y evita la aplicación de agroquímicos o abonos orgánicos.
Destacó que con técnicas de manejo y preservación se puede replicar sin contratiempos en las comunidades productoras, como sucedió en la localidad El Garabatillo, Guanajuato, donde mujeres desarrollan un proyecto para cosechar la fruta para autoconsumo y vender el excedente al menudeo en el tianguis local.
La Secretaría de Agricultura refirió que esta especie, endémica de México, crece en planicies, mesetas y laderas secas con altitudes de mil 650 a dos mil 200 metros sobre el nivel del mar, en climas semisecos.
Agregó que su distribución es amplia porque se encuentra en los estados de Aguascalientes, Durango, Guanajuato, Guerrero, Hidalgo, Jalisco, México, Michoacán, Nuevo León, Oaxaca, Puebla, Querétaro, San Luis Potosí, Tamaulipas, Veracruz y Zacatecas, entre otros.
El investigador del Centro Regional de Investigación Centro (CIRCE) del INIFAP, Ricardo Rivera Vázquez, detalló que el garambullo cuenta con propiedades antioxidantes mayores en comparación con otros frutos rojos (mora azul, arándanos y fresa).
Es también una gran fuente de vitamina C porque posee un porcentaje más elevado que la toronja, uva, manzana, durazno, zarzamora y mora azul, y tiene minerales (potasio, hierro y zinc), añadió.