Mayo 21, 2022
Al cierre de 2021, México produjo 63 mil 400 toneladas de miel, lo que significó un incremento de 17 por ciento en comparación con las 54 mil 200 toneladas registradas un año atrás, lo que mantiene a la apicultura nacional en los primeros lugares del subsector pecuario, por su importancia económica y social.
El aprovechamiento comercial de las abejas se da principalmente en el sureste del país, en entidades como Yucatán, Campeche, Quintana Roo y Chiapas.
Actualmente, hay alrededor de 43 mil apicultores en todo el territorio nacional, registrados en 508 asociaciones ganaderas especializadas, informó la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural.
Resaltó que la derrama económica que genera esta actividad beneficia a uno de los sectores rurales más desprotegidos, favorece el desarrollo de industrias conexas y genera empleos temporales durante las épocas de cosecha de miel.
La dependencia federal expuso que, además, la apicultura es importante porque aumenta la calidad y el rendimiento de los cultivos, lo que genera un incremento en alimentos de origen vegetal, materia prima textil e insumos agropecuarios.
En el marco del Día Mundial de las Abejas, la Coordinación General de Ganadería de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural llevó a cabo el foro: “El sector apícola en México”, con el fin de brindar información referente a la producción nacional realizada a través del uso de abejas Apis mellifera y su importancia como los principales agentes polinizadores.
El evento fue inaugurado por el coordinador general de Ganadería, Arturo Macosay Córdova, y participaron ponentes del sector académico y de investigación como el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP) y las facultades de Medicina Veterinaria y Zootecnia (FMVZ) y de Estudios Superiores Cuautitlán (FESC) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y del Consejo Técnico Consultivo Nacional de Sanidad Animal (CONASA).
También, estuvieron asociaciones ganaderas, como la Asociación Ganadera Nacional de Criadores de Abejas Reina y Núcleos (ASGANAREN), Asociación Nacional de Médicos Veterinarios Especialistas en Abejas (ANMVEA A.C.) y empresarios apícolas.
En el evento se destacó que, en 2021, Agricultura dio a conocer la Estrategia Nacional para la Conservación y Uso Sustentable de Polinizadores (ENCUSP), que tiene como objetivo orientar las políticas y el trabajo de los sectores productivo y ambiental al desarrollo sustentable y la seguridad alimentaria del país.
La Estrategia permitirá encaminar a México hacia una agricultura amigable con la biodiversidad y contribuye a la atención de los objetivos del Programa Sectorial de la dependencia que son garantizar el derecho a una alimentación nutritiva, suficiente y de calidad, promover la agricultura sustentable y avanzar hacia la seguridad alimentaria.
Asimismo, Agricultura y el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) lanzaron el Atlas Nacional de las Abejas y Derivados Apícolas, el cual compila, por primera vez en un único sitio web, información sobre la apicultura en México, desde características de la miel hasta aspectos relacionados con la actividad económica en torno a las especies domesticadas.
Las abejas en México
Dentro de los insectos polinizadores (entomófilos) se encuentran las abejas y se estima que existen entre 21 mil y 25 mil especies en el mundo. Se agrupan en nueve familias, de las cuales seis están presentes en México con un estimado de más de dos mil especies.
Las abejas pertenecen a la familia Apidae, subfamilia Apinae en donde se ubican diferentes tribus (Meliponini, Bombini, Apinini, Euglossini, entre otras) con diversos géneros y especies.
La gestión de algunas especies está muy extendida, como la abeja melífera occidental (Apis mellifera), la abeja melífera oriental (Apis cerana). De estas, la abeja melífera occidental es el polinizador más popular en todo el mundo; se estiman 81 millones de colmenas a nivel global.
A pesar de lo anterior, las abejas en su gran mayoría son silvestres y aunque no son aptas para gestión, desempeñan funciones importantes a nivel mundial en la polinización de los cultivos.
Pero, además, tienen un papel destacado en diversos ámbitos como en la seguridad alimentaria, nutrición, sustentabilidad agrícola, medio ambiente, conservación de ecosistemas y diversidad biológica entre otros.
El cultivo de las abejas sin aguijón se denomina meliponicultura y es una actividad social y cultural importante en nuestro país. Su distribución va desde México hasta Argentina, limitándose a las regiones tropicales y subtropicales.
Se les refiere como “abejas sin aguijón” derivado de que él mismo se encuentra atrofiado, por lo que sus mecanismos de defensa suelen ser sus mandíbulas y la secreción de sustancias al morder principalmente.