Diciembre 2, 2021
Todos los grandes imperios acaban desmoronándose por la falta de control de sus colonias, apéndices de su cuerpo que se vuelven en su contra y terminan golpeando duro sobre la matriz. Así es como le ha ocurrido a Facebook por la falta de control sobre sus publicaciones. Pero, ¿qué es lo que ha sucedido?
Una filtración de documentos internos publicados por un consorcio de medios de comunicación internacionales ha destapado que la carencia de vigilancia sobre el contenido de las publicaciones han provocado el resurgimiento de discursos de odio y extremismo religioso en países como Afganistán, Etiopía, India y Yemen, mientras que en Myanmar se han tolerado posts para alentar el genocidio contra el colectivo minoritario rohinyá.
¿Qué son los papeles de Facebook? Estos documentos se basan en informes de la empresa o entrevistas a ex empleados en los que se comprueba como Facebook dejó de controlar su contenido de forma adecuada durante su expansión mundial, la cual ha conseguido que se la red social se encuentre en más de 180 países, con más de 2.700 millones de usuarios cada mes que hablan más de 150 idiomas.
Ética versus negocio a toda costa
La lista de Schindler, La vida es bella, El niño de pijama de rayas y otras tantas historias cuya moraleja fue: «los malos ganan cuando los buenos no hacen nada para impedirlo». ¿De qué sirve aprender de la historia si repetimos los mismos errores? se preguntan los críticos. Tal y como se evidencia en las filtraciones, las carencias en seguridad de Facebook se fundamentan en cuatro problemas:
Sustitución de moderadores humanos por sistemas de inteligencia artificial, más baratos, que no son capaces de entender lenguas minoritarias, y por lo tanto controlar, cientos de miles de posts de usuarios en países de habla no inglesa.
Incapacidad del gigante de internet comprender sus propios algoritmos.
Pasividad para actuar donde la Inteligencia Artificial no llega. Facebook solo actuó en el 4% de los mensajes de discursos de odio, como racismo y extremismo contra las mujeres, y en menos de un 1% de las publicaciones de contenido violento, como las llamadas al genocidio.
Desactivación de los sistemas de seguridad durante las elecciones de Estados Unidos en 2020, lo que desembocó en un ataque en el Capitolio.
Desde Facebook se defienden aduciendo que jamás se ha puesto el interés económico por encima de la seguridad de los usuarios y los ciudadanos. Tal y como explican “disponemos de más de 40.000 empleados y hemos invertido 13.000 millones de dólares con un objetivo: garantizar la seguridad de la gente en Facebook”.
¿El Gobierno de México censura Facebook? Según el artículo 197 se establece la obligación de los proveedores de internet, como Telmex, izzi o Megacable a «bloquear, inhibir o anular de manera temporal» el servicio en el caso de que se utilice para publicar contenidos que atenten contra la seguridad civil. No obstante lo cierto es que el Gobierno de México, pese a heredar esta legislación, ha solicitado a Facebook la censura de contenidos directamente para retirar vídeos como el de la masacre en la escuela primaria de Monterrey.
Gracias a la confesión de France Haugen, exejecutiva de Facebook, la compañía de internet priorizó el beneficio económico sin asegurar el control de los contenidos. La ex directora de Norte de África y Oriente Próximo aseguró que los objetivos de expansión mundial fueron de forma estratégica similares a los de un país colonizador, en el sentido de agradar el máximo a cualquier usuario sin poner trabas para tener una mayor acogida. Hoy más del 90% de usuarios de Facebook se encuentra fuera de los Estados Unidos.
Fuente: https://holahorro.mx/blog/facebook-permitio-el-discurso-del-odio/