Mayo 13 de 2025.

La Junta de Coordinación Política y la Mesa Directiva del Senado de la República de México emiten un posicionamiento oficial en rechazo a la iniciativa «The One, Big, Beautiful Bill» propuesta por el congresista estadounidense Jason Smith, que busca imponer un impuesto del 5% sobre las remesas enviadas por migrantes desde Estados Unidos.

El argumentos clave es la doble Tributación Injusta (inhumana):

Destacan que los migrantes ya pagan impuestos en EE.UU., por lo que gravar sus remesas (20% de sus ingresos) sería una medida regresiva que afecta principalmente a un grupo sin acceso pleno a beneficios sociales.

El 80% de sus ingresos se reinvierte en la economía estadounidense, beneficiando a ambas naciones.

El riesgo de nformalidad:

Alertan que el impuesto incentivaría el uso de canales informales para enviar dinero, aumentando la vulnerabilidad de los migrantes y reduciendo la transparencia financiera.

Un mpacto binacional:

Subrayan que las remesas son fruto del trabajo honesto que fortalece las economías de México y EE.UU., y que la medida contradice los principios de libertad económica y los acuerdos comerciales de América del Norte.

Llamado:
El Senado mexicano, ejerciendo sus facultades constitucionales en política exterior (Artículo 76), insta al legislativo estadounidense a reconsiderar la propuesta, enfatizando que las relaciones entre ambos países deben construirse mediante diálogo y cooperación, no con barreras económicas.

En conclusión:
El comunicado combina un análisis técnico (evidencia fiscal y económica) con un enfoque humanitario, resaltando el valor social de las remesas y apelando a la corresponsabilidad bilateral. Busca influir en la opinión pública y en la toma de decisiones políticas en EE.UU., defendiendo los derechos de los migrantes y la interdependencia económica entre ambas naciones.

Texto íntegro del Comunicado:

COMUNICADO DE LA JUNTA DE COORDINACIÓN POLÍTICA Y DE LA MESA DIRECTIVA DEL SENADO DE LA REPÚBLICA

13 Mayo 2025

Desde el Senado de la República, haciendo uso de las facultades en Política Exterior conferidas en el Artículo 76 de la Constitución, expresamos nuestro desacuerdo con la iniciativa promovida por el republicano Jason Smith en la Cámara de Representantes de Estados Unidos, en el marco del proyecto denominado The One, Big, Beautiful Bill en el que, entre otras medidas, se busca imponer un impuesto del 5% sobre el monto de las remesas que envían las y los migrantes.

Es relevante destacar que, en Estados Unidos, todos los trabajadores, más allá de su estatus migratorio, pagan de manera cotidiana sus impuestos, por lo que esta medida supondría una injusta doble tributación sobre ese 20% del ingreso laboral de los trabajadores migrantes que, reiteramos, ya tributado, abandona el país. Estos impuestos, además, no se traducen en un gasto social para el grupo poblacional que los genera, en muchos casos imposibilitado para acceder a las políticas sociales. El 80% restante, es decir, la mayoría de sus ingresos se queda en la economía estadounidense, mejorando el bienestar de quienes allí viven.

Hacemos un llamado a la mesura ante esta propuesta, ya que proyecciones técnicas realizadas demuestran que la imposición de un impuesto o arancel a las remesas solo desincentivaría el uso de las vías regulares y formales, orillando a muchos migrantes a buscar alternativas fuera del sistema financiero para enviar dinero a sus familias.

Desde el Senado, sostenemos que las remesas son fruto del esfuerzo de quienes, a través de su trabajo honesto, fortalecen no solo a la economía mexicana, sino también a la de Estados Unidos, por lo que consideramos esta medida como arbitraria e injusta, y hacemos un llamado al legislativo estadounidense a reconsiderar reflexivamente esta propuesta, que dañaría la economía de ambas naciones. Y que, además, es contraria al espíritu de libertad económica que dice defender el Gobierno de Estados Unidos, y que permea en los acuerdos sobre libre comercio de América del Norte.

Desde nuestro punto de vista, las relaciones entre pueblos hermanos se fortalecen desde el diálogo y el entendimiento mutuo, tendiendo puentes, y no levantando muros ni barreras económicas.